miércoles, 13 de abril de 2011

Vestigios

Cuentame que fue
de aquel perfume de jazmin
del sol naciente en tu cabellera
y de esa sonrisa que embruja

Cuéntame que fue
de aquellas lágrimas perdidas
y de el tiempo que se nos fue
o es que acaso
¿el Sol todo marchitó?

Cuéntame que fue
de aquellos sueños
y de aquel canto nuestro

¿Qué fué?
Si hoy ya nada es nuestro

La noción de la soledad (Saúl Martín Tuyub Castillo)

Qué pueda ser, aquello que angustia un recuerdo escondido.
Que pueda ser, aquello que oprime el dolor del tiempo perdido.
Què pueda ser, aquello que vive escondido
esperando el momento en que pueda salir
y quedarse sin estar.

Es aquella memoria
Es aquel pedazo de tiempo sin historia
Es aquella imagen torcida
Aquella sonrisa vuelta a dibujar.

Es aquello
que en resumidas cuentas es
sólo en el cerebro dolor.

viernes, 4 de febrero de 2011

El Ave (Alicia Eugenia Chi Rodríguez)

Reír, llorar, amar…
Luz de la vida.
Un solo instante, eso pasará

Ave que vuelas, ¡libre! Eres feliz
No me mires, aún no puedo ser como tú.

Anhelo lo que para ti no existe,
Cosas vanales…

Por el gran milagro de volar: VIVES, CANTAS, EXTIENDES TUS ALAS.

Espera, pronto lo haré como tú
volar tan alto, disfrutando sólo ese momento:
tu vuelo, tu canto, tus alas.

viernes, 21 de enero de 2011

Palabras del agua (Saúl Martín Tuyub Castillo)

Murmuraba y con su voz húmeda
Cantaba cálido canto ininteligible,
Desesperada, acarició mi piel con la suya
Una vez y otra, otra vez
A tiempos, a destiempos
Y en la brisa que sus poros exhalan
Escuché lo que las palabras no pueden decir:
Acércate, adhiere tu mejilla a la mía
Y toca mi ser
Y déjate tocar,
Entonces, sólo así
Comprenderás quién es el hombre
Y adónde va,
¿Quién eres tú?

9 / Noviembre / 2010

miércoles, 19 de enero de 2011

Noches de mi tierra (Carlos Alberto Pérez y Pérez)

He nacido en esta bella tierra de poetas y trovadores
donde las voces se pierden con las del cenzontle,
donde los huipiles se confunden con el horizonte
y el sonido de las guitarras, llega a los corazones.

Aquí las serenatas irrumpen las frescas noches
Fundiendo las sonoras liras, con las vibrantes voces
Levantando del lecho a las niñas ricas y a las mujeres pobres
Escuchando tiernas canciones al pie de sus solitarios faroles

He nacido en esta tierra de Cárdenas y Palmerín
De Peón Contreras y del inolvidable Chan Cil;
He nacido en esta tierra de vibrantes escritores,
de grandes poetas y de trovadores mil.

Aquí las noches su silencio interrumpen al tres de clave
Al rítmico arpegio de la romántica lira,
A requinto de Despierta dulce amada mía
O alevántate amor de mis amores.

La noche se adorna con la música de los ruiseñores
que entonados desvelan a los románticos soñadores
Ruiseñores que tejen en el alma esperanzas y sin sabores
Que arrullan en la noche a los románticos corazones

Los rayos de oro interrumpen los acordes
Las cristalinas voces se apagan ante los amores
Las guitarras y las liras ya no tocan sus acordes
Las mujeres de mi tierra, cierran sus balcones.